Ruta Panamericana

Muy pronto empezaré mi aventura en tierras americanas. Un viaje mochilero en solitario sin fecha de vuelta que empieza el 18 de agosto en Chile y que relataré en el blog del periódico regional El Norte de Castilla.

¿Pero qué es la ruta panamericana? La ruta recorre la parte oeste del continente americano, es decir, el lado del pacífico desde el sur chileno, pasando por Perú, Ecuador, Colombia, Centroamerica entera, México, Estado Unidos, Canadá y Alaska. Ahí es nada.

Una aventura que relataré en la medida que las conexiones a internet me dejen desde mediados de Agosto. ¿Cómo se prepara un viaje sin billete de vuelta? ¿Cuánto dinero se necesita? ¿Y el trabajo? ¿Y la familia? ¿Estas loco? Poco a poco iré respondiendo a estas y más preguntas en los próximos artículos, pero no, no estoy loco, solo soy un mochilero de provincias.

También puedes seguir mis aventuras en Instagram, Facebook y twitter.

#Si no viajo, leo... Ebano. Ryszard Kapuscinski.

En la literatura de viajes hay muchos tipos de libros, como por ejemplo los que escriben sus viajes personales de su vuelta al mundo llenas de aventuras y anécdotas; o como las publicaciones de los periodistas, que, o bien, se han especializado en viajes, o bien, son corresponsales en países lejanos. En este último grupo se encuentra uno de los más importantes periodistas y corresponsales en África. Kapuscinski, polaco de nacimiento y con unos genes llenos de vitalidad y ganas de meterse en el meollo de las historias que convirtió su libro ébano en una obra de culto o, quizás, la historia le ayudó a que así fuese, sin menospreciar una extraordinaria pluma que nos plasma las sensaciones de tal modo que parece que estés viviendo, sintiendo u oliendo la atmósfera al leerlo.

Ébano es una de las obras más importantes de la literatura de viajes, por lo que es posible que no te esté descubriendo nada si eres aficionado a este género, pero para los lectores que no se hayan acercado al autor polaco es la mejor elección para empezar a conocerle. Kapuscinski fue corresponsal en África en las décadas de los 60 y 70, por lo que gracias a eso, que es a lo que me refería antes, vivió una época plagada de golpes de estado, y a un espíritu aventurero se recorrió el continente africano de arriba a abajo en el momento más álgido de su historia. Es cierto que, por desgracia, a estos países les cuesta mucho arrancar y salir de ese pozo en el que le metieron los colonizadores y fue, precisamente, Kapuscinski testigo de ver a los primeros países africanos en independizarse de sus dominadores. No con buenos resultados, como explica el autor.

África es extensa y muy interesante, a pesar de que solo nos traigan noticias malas está en constate cambio como nos explica el autor. El continente es grande y cualquier paso que dan, por pequeño que sea, es destacable. Cada capítulo del libro acompañamos al autor de una punta a otra y nos cuenta en primera persona el ritmo africano. Un ritmo muy diferente al que vivimos en Europa y en el que hay que tener una sobredosis de paciencia.

 

#Si no viajo, leo... Una declaración de intuiciones de Álvaro Neil

“Reflexiones de un payaso tras más de once años recorriendo el mundo en bici”. Este es el resumen que hace Álvaro Neil, conocido como biciclown, en la portada de su libro. Si esa reseña no te ha enganchado, no sigas leyendo, no te va a interesar el libro y vas a perder un precioso tiempo de tu vida. De eso precisamente habla Álvaro en su libro.

Desde que hice mi viaje mochilero me han atraído cada vez más, casi como una obsesión, cualquier historia de viajes largos. No hay más que ver la lista de mis lecturas. Me da igual que sean mochileros o no, nómadas a pie, en coche, en moto, a caravana o en bicicleta, como Álvaro, que un buen día, allá en el 2004, empezó a pedalear y lleva así diez años viviendo de un lado a otro y ganándose la vida como clown, es decir, payaso, por eso se hace llamar “biciclown”.

Ha escrito varios libros y realizado varios documentales, pero este último relato no viene a contarnos sus aventuras en algún país de Asia, ni alguna anécdota de su periplo en la bicicleta o si ha pinchado y se ha quedado tirado en el fin del mundo. Su décimo aniversario como nómada ha querido hacer una pausa, un reposo de su larga vida encima de la bicicleta, y nos deja unas reflexiones de la vida. Sin ser pretencioso ni dar lecciones a nadie, nos cuenta, con la experiencia de una persona que ha dormido en multitud de ocasiones mirando a las estrellas, las conclusiones a las que ha llegado a estas alturas de viaje, o de vida, porque su vida es un viaje.

Podría decir que no es un relato de viajes, pero sí lo es, es un viaje al interior del ser humano, un viaje a las entrañas del por qué y, con las experiencias de sus más de diez años de aquí para allá, nos trae este regalo resumido en unas páginas, por cierto, muy bien editadas. Sus seguidores le han querido ayudar y, entre unos y otros, han hecho un libro especial, como la historia que nos cuenta “biciclown”.

Yo pude comprar el libro junto a unos imanes cuando hizo el crowdfunding. Ahora puedes adquirirlo en su web por 15,60 euros.

Pueblos de Guipúzcoa

Una ruta por pueblos de Guipúzcoa que merecen mucho la pena, no solo por su historia sino porque tienen una cultura y una gastronomía sublime. Siempre hay una excusa para visitarlos.

1. Oñati

Al llegar al pueblo, pregunté a un lugareño un sitio donde comer (este fue el tripadvisor de toda la vida) y el hombre, que tenía ganas de hablar, empezó a darnos consejos sobre qué visitar en los alrededores y nos preguntó si ibamos a ir a visitar el monasterio de Aránzazu. No teníamos ni idea de este sitio. Tras visitarlo, nos quedamos un poco perplejos al verlo.

Santuario de Aránzazu, Oñati, Guipúzcoa.

2. Hondarribia (Fuenterrabía)

Según nos contó la dueña de la casa rural donde nos hospedamos, hay una fiesta popular en la que las peñas (solo de hombres) eligen a una mujer que sale en el desfile con ellos y se encarga de pagarles la comida a todos (a veces les sale por un ojo de la cara la cuenta), pero algunas mujeres pidieron igualdad en las fiestas y se montó la de dios.

Hondarribia, Guipúzcoa.

3. Pasaia

Para mí este pueblo está asociado a la canción de Barricada. El pueblo es una carretera que sigue la orilla del río junto a la montaña. Peculiar al menos.

Pasaia, Guipúzcoa.

4. Zarauz

Menos mal que nos acercamos en pleno mayo y estaba el cielo nublado. Si ya nos costó aparcar en estas fechas, no me quiero imaginar hacerlo en plena temporada alta. La playa es su mayor atractivo, además de que Arguiñano, el pintoresco cocinero televisivo, tiene su restaurante a pie de arena. A la izquierda del horizonte se ve Getaria.

Zarauz, Guipúzcoa.

5. Zumaia

Para la camarera donde nos tomamos unos txacolís era una simple playa, pero los acantilados que tiene Zumaya no son de lo más normal. Las placas arquitectónicas que reúne en un pequeño espacio son espectaculares. No había visto nada similar.

Playa de Zumaia, Guipúzcoa.

6. Loyola

Hablar de Loyola es hablar de su santuario y, sobre todo, de su basílica. Será mi falta de cultura, pero desconocía esta barbaridad. El conjunto arquitectónico y escultural que tiene la basílica es digno de visitar. El pueblo está entre Azpeitia y Azcoitia.

El Santuario de Loyola.

#02 Valladolid en 24 horas.

Iglesia de San Pablo

Valladolid (España) es una ciudad pequeña con grandes tesoros y mucha historia. Si solo tienes una mañana para visitarla, puedes hacer este recorrido que he preparado de mi tierra natal. Empieza desde la Pl. Colón, cerca de la estación de tren y el Campo Grande.

Campo grande

Este parque es el pulmón de la ciudad. Tiene un paseo central que lo recorres en un par de minutos. No es muy grande, pero si tienes niños, hay zona infantil, un bar, baños públicos y un montón de rincones para sentarse y descansar. Pero lo más interesante es el lago lleno de patos, cisnes y pavos reales. Cuando era pequeño, había un barquero muy famoso que te daba una vuelta al lago. El hombre murió, pero se le hizo una escultura para recordarlo. Personalmente, tengo muy buenos recuerdos de mi infancia en este lugar, por lo que es el mejor sitio para empezar a conocer mi ciudad.

Plaza Zorrilla y de fondo la Academia de Caballería

Al final del Campo Grande está la Pl. Zorrilla, ahora reformada, dedicada al famoso poeta vallisoletano (no es el único sitio con su nombre, también está la calle zorrilla y el estadio de fútbol). Aquí se puede ver la Academia de Caballería, un edificio interesante, sobre todo, iluminado por la noche. Desde la Pl. Zorrilla se accede a la calle Santiago, el centro neurálgico de los comercios. Es una calle peatonal que te lleva a la Plaza Mayor.

Plaza Mayor

Como buena ciudad española, la Plaza Mayor es el centro por excelencia, donde está el ayuntamiento, donde se celebran los conciertos y cualquier evento que se tercie. Si te pierdes en España, pregunta por la Pl. Mayor y vuelta a empezar. Antes salían todos los autobuses desde esta plaza, pero desde que la reformaron, ahora es peatonal y todo se ha transladado a la Plaza Fuente Dorada, a un minuto. Andando un poco más, está la Catedral.

La Catedral

No es una catedral al uso. Es un edificio que está a medias (por culpa de un terremoto), pero de lo que iba a ser el proyecto a lo que ha quedado no parece una catedral. Hace poco (2015) inauguraron un ascensor para subir a la torre y ver la ciudad. Para mi gusto han destrozado la fachada. Su entrada es en el lateral, un buen punto para recorrer varios sitios interesantes.

Catedral de Valladolid

Uno de ellos es la Plaza de la Universidad, donde está la Facultad de Derecho, un edificio histórico y con una fachada impresionante, y justo detrás de la Catedral está la Iglesia de la Antigua. Punto de encuentro para empezar a salir de bares los fines de semana (Por lo que ya tenéis localizado otra zona de interés).

Iglesia de la Antigua

Desde la Antigua hasta la Iglesia de San Pablo hay cinco minutos andando.

Iglesia de San Pablo

Sin duda es el edificio más emblemático de la ciudad. Su fachada es espectacular y casi se podría decir que hace las veces de la Catedral. En la misma plaza San Pablo está el Palacio Real y el Palacio Pimentel. Dos edificios históricos donde transcurrió la infancia del rey Felipe II. (Momento en el que aprovecho para recordar que Valladolid fue capital durante seis años). Además, este es un buen lugar para recorrer los lugares por donde se localiza la novela de "El hereje", del escritor Miguel Delibes.

Iglesia de San Pablo y el Palacio de Pimentel.

En un lateral de la iglesia de San Pablo está el museo de escultura, el Colegio de San Gregorio, donde están las esculturas de Gregorio Fernández y que utilizan durante la Semana Santa. El Cristo yacente es el más aclamado.

El recorrido que he preparado termina en la Plaza Mayor, pero antes de llegar yo recomendaría pasar por la plaza del viejo coso. Una pequeña y escondida plaza con mucho encanto.

Tapas cerca de la Plaza Mayor

Para terminar el recorrido lo mejor es irse de tapas cerca de la Plaza Mayor y terminar de la mejor manera un día turístico por la ciudad. 

MAPA




CÓMO LLEGAR A VALLADOLID - TRANSPORTE

Coche
Desde Madrid es muy fácil llegar por la autovía A6 hasta Tordesillas. No tiene perdidad. Hay 200 kilómetros en coche desde la capital y se tarda menos de dos horas (a velocidad normal). Este trayecto tiene peaje (12€ en dic. 2015)

Las principales empresas de alquiler de coches tienen sede en la estación de trenes o en el aeropuerto.

Autobuses
ALSA es la compañía que trabaja desde Madrid. Cuesta 15 euros (2015) el viaje y tarda dos horas y media. También tiene trayectos directos desde el aeropuerto de Barajas. (Más información aquí).

La estación está muy cerca del centro. Justo detrás de el Campo Grande.

Tren
El AVE llega a la capital en una hora. Es más caro que el autobús, pero es la forma más cómoda y rápida de llegar. Los precios de solo ida rondan los 40 euros (2015). (Más información aquí).

Muy cerca de la estación de autobuses y de el Campo Grande. Llegas al centro en 10 minutos andando.

Aeropuerto (Villanubla)
Sí, Valladolid tiene aeropuerto, no sé hasta cuando, pero de momento trabaja Ryanair y tiene conexión con Barcelona. Está a 15 km del centro, por lo que necesitas medio de transporte. El más económico es el autobús (Más información aquí).

**Nota: De hoteles y hostales no puede opinar porque no he estado en ninguno, pero hay una oferta bastante extensa. La ciudad recibe muchos estudiantes en septiembre, sobre todo extranjeros que vienen a aprender el Español.


FECHAS DE INTERÉS

Semana Santa. Dependerá del año, entre finales de Marzo y principios de abril.
Fiestas Patronales. Las dos primeras semanas de Septiembre. Conciertos, feria y tapas por doquier.
SEMINCI. Semana Internacional de Cine. Finales de Octubre.

#01 Valladolid de tapas

Tapas del bar Jero

Ir de tapas es una forma de vida en España. Es cultura. Es lo que se echa de menos cuando estas fuera. Estamos tan acostumbrados a ver las tapas en los bares que es algo normal en nuestra vida y en muchas ocasiones será lo que nos haga volver a un local. No solo por el trato del camarero (que influye), pero la calidad de las tapas (y la cantidad) definirá la ruta de tapas entre los amigos.

Lo más interesante de esta cultura es llegar a conocer los bares donde las tapas te la dan gratis junto a la bebida,  tanto es así que hay ciudades donde es todo un acontecimiento. Hay verdaderos expertos, sobre todo los jubilados, que conocen los bares donde gracias a las tapas "prácticamente comen". 

Pues bien, Valladolid, no es conocido por esto. De hecho, en el centro es complicado encontrar establecimientos en el que te ofrezcan algo para picar junto a la consumición. Solo en los bares de barrio (la periferia) tienen esta costumbre, por lo que como esto está dedicado al turisteo, me centraré solo en los bares que a mí y mis amigos nos gustan. Pagando, claro está.

(**Nota. Si eres vegetariano, la variedad es reducida, pero no por ello se puede disfrutar de buenas tapas**)

LA SEPIA
Plaza de la Rinconada, 9.

Un bar clásico. Su nombre describe su especialidad. Hace poco se transladaron y convirtieron el bar en una especie de bar-tapas-fastfood... han perdido un poco de esencia, pero si te gusta la sepia, no puedes dejar de entrar aquí.

Tienen tres locales en la ciudad.

-Ración de Sepia 6,20 €












JERO
Calle de Correos, 11 

Se ha hecho conocido por su gran variedad de tapas y, sobre todo, porque ha ganado varios premios al mejor "pintxo". Son un pelín caras, pero al menos una hay que probar.

-Tapas: 2€ - 3€

EL CORCHO
Calle Correos, 2

Si te gustan las croquetas, no te puedes ir de Valladolid sin probar las delicias de este bar. Yo solo paso por aquí para tomarme un Verdejo (Rueda) y una croqueta.

-Croquetas 1,50 €











LA TASQUITA
Calle de la Caridad, 2

Este bar tiene unos bocaditos muy recomendables. Mas que una tapa es para los que quieren empezar con buen pie. Después ya puedes ir probando otras cosas. Precio y calidad excelente.

-Tapas: 1,50 €
-Bocaditos solomillo roquefort: 2.50 €

MAPA TAPAS VALLADOLID

#Si no viajo, leo... Un viaje iniciático a Europa de Jorge Sánchez.

"Tras una vida viajera parecida a un cuento, en el año 2003 pude proclamar haber visitado con cierta profundidad la totalidad de los 192 países existentes en la Tierra. A lo largo de esos siete viajes en busca de conocimientos me vi involucrado en un sinfín de aventuras que a punto estuvieron de costarme la vida."

Jorge Sánchez nació en Hospitalet de Llobregat en 1954, pero desde muy pequeño quiso descubrir el mundo y lo ha logrado. Echar un vistazo a la vida de una persona que se ha recorrido todos los países del mundo y ha dado la vuelta al mundo seis veces suena una dulce melodía que no quieres que termine, por eso mismo Jorge reúne muchas de sus aventuras en sus libros (o como él los llamo "sus niños"). Tiene un total de veintiséis, y seguro que todavía se guarda muchas anécdotas que no querrá compartir.

Como cualquier viaje, hay que dar un primer paso y así lo hice al acercarme a su larga colección. Empecé con "Un viaje iniciático a Europa", su primer libro en el que nos cuenta su escapada por Europa en los años setenta. Un viaje totalmente diferente para los que hemos empezado a viajar en el siglo veintiuno.

Jorge viaja con poco dinero, es joven, tiene ganas de aventura y empieza haciendo dedo (autoestop). Recorre Francia, Inglaterra, Bélgica, Holanda, Alemania, Suiza e Italia, pero no hace turismo. Vive, se para, trabaja, sobrevive y sigue viajando. Aprende los idiomas locales, que por lo que parece, se le dan bien, y vuelve a casa para escribir su primer libro de viajes. Pronto, empiezo con otro.

Una entrevista que le hizo Buenafuente hace unos años.

Para comprar sus libros puedes visitar su web.

#Si no viajo, leo... Paisajes del mundo de Javier Reverte.

De mayor quiero ser como Javier Reverte, o al menos haber viajado tanto como él o haber logrado escribir tan bien como él.

Hace un par de años la editorial La línea del horizonte publicó, según firma en la portada "las mejores crónicas y reportajes de un gran viajero I". Esta afirmación resume, no solo el libro, si no que vaticina, para el gusto de sus lectores, una segunda parte.

En el mundo cinematográfico no tienen buena fama las segundas partes, pero en los libros es diferente. Más si cabe si son más crónicas de viajes de Javier Reverte. No voy a descubrir ahora a este periodista septuagenario que lleva toda la vida acercándonos el mundo a través de sus reportajes, pero por eso mismo, para los que no hemos tenido la oportunidad de leerle en los años ochenta y noventa, es una buena oportunidad para saborear sus letras en esta recopilación, y ver su visión de otras culturas y disfrutar, como siempre, sentado en tu sofá grandes aventuras y viajes.

El propio Javier se implica en este proyecto y rebusca entre sus recuerdos, para recopilar, haciendo un arduo trabajo, sus mejores textos, o sus viajes mas interesantes, o simplemente recuerdos que le marcaron fruto de su extensa y larga profesión. Cada capítulo te traslada a un rincón del mundo, desde el río Congo hasta un recorrido por las Hurdes salmantinas, desde el Amazonas a las geishas de Japón.

Termina el libro con una reflexión muy interesante: "Leer, viajar, explorar, aventurarse y, al final, escribir". Bueno, pues en eso estamos.